En el primero de los grupos se enfrentan dos clásicos de la competición, el Bayern Munich de Van Gaal (y ahora también de Robben, aunque es posible que no lo sea de Ribéry) contra la Juventus de Diego, Felipe Melo y Del Piero. Junto a ellos estará uno de los cocos del tercer bombo, el Girondins de Burdeos comandado por Yoan Gourcuff y dirigido magistralmente por Laurent Blanc. Ojo con los franceses porque pueden dar la sorpresa y clasificarse, eliminando a uno de los favoritos. El cuarto en discordia será el Maccabi Haifa, que bastante tendrá si es capaz de sumar algún punto en casa.
En el grupo B aparece uno de los favoritos, el nuevo Manchester United. Los actuales subcampeones han tenido suerte en el sorteo, y estará acompañado por el CSKA de Moscú, un rival siempre incómodo pero que no aspira a ser primero de grupo; el también incómodo Besiktas, campeón turco más por demérito de sus rivales que por valor propio; y el Wolfsburgo, que a pesar de venir del cuarto bombo tiene opciones de clasificarse para la siguiente ronda, con su genial delantera (Dzeco y Grafite) y Misimovic como estrellas.
En el grupo C aparece el primer español, el Real Madrid. Los blancos, que por primera vez no fueron cabeza de serie, se enfrentarán a un clásico como el Milan, aunque los de Leonardo se encuentran en horas bajas, y ya no son el temible rival de hace unos años, cuando era un habitual de las finales. El tercero del grupo es el Olympique de Marsella, pero ojo con los franceses porque se han reforzado muy bien (14 altas) y su nuevo entrenador, Deschamps, ya sabe lo que es llevar a un equipo modesto a la final de la Champions. Por último estará el Zurich, un equipo flojo de Suiza que no debería dar problemas a ninguno de sus rivales.
En el grupo D aparece el otro equipo madrileño, el Atlético, que se enfrentará al Porto, que le eliminó en la edición del año pasado. Esperemos que este año Abel salga con Agüero y Forlán, y se deje las rotaciones para otro día, por ejemplo para el del Apoel Nicosia, el rival más débil del grupo. Por otro lado, el coco del grupo será el Chelsea de Ancelotti, que con cinco semifinales en los últimos cinco años no parece un rival fácil.
En el grupo E puede haber leches por clasificarse para la siguiente ronda. Un desmejorado Liverpool, un renaciente Olympique de Lyon y la Fiorentina tienen nivel para clasificarse. Los duelos entre ellos decidirán quien se clasifica, y en caso de empate, los resultados con el débil Debreceni tendrán la palabra.
El grupo F es el que tiene más morbo de todos. Se enfrentan en Barcelona de Ibrahimovic contra el Inter de Mourinho y Samuel Eto'o. El primer partido es en San Siro, pero el Barça debería preparar algo para la vuelta de Eto'o en noviembre. Los otros dos acompañantes tienen dos dificultades, el frío y la distancia: Dinamo de Kiev y Rubin Kazan (donde juega César Navas). Estos últimos se encuentran a unos 800 kilómetros al este de Moscú, y ni siquiera tienen aeropuerto, por lo que su visita en pleno invierno no va a ser nada fácil.
El grupo G es el más débil de todos, por suerte para el Sevilla. El Rangers escocés sólo es complicado en su casa, el Sttutgart del cedido Hleb es el más débil de los alemanes, y el Unirea Urziceni entrenado por Petrescu no aspira a nada hoy por hoy. Los de Manolo Jiménez no deberían tener problemas para superar el grupo como primeros.
Por último, en el grupo H podremos ver gran fútbol, con la presencia del Arsenal de Wenger y Cesc y el AZ Alkmaar de El Hamdaoui y Dembele. Con ellos veremos al bien reforzado Olympiakos griego, y el Standard de Lieja, plagado de jóvenes aspirantes a estrellas, como Defour o Witsel.
Con todos los grupos presentados, ya llega el momento de hacer las apuestas y ver quienes son los favoritos de cada grupo. El 15 de septiembre empieza la competición más grande a nivel de clubes.