Hace unos meses hablábamos del éxito de Ernesto Valverde como entrenador del Olympiakos, con el que había ganado la Liga griega. El otro título que tenía en juego, tras la conquista del campeonato heleno, era la Copa de Grecia. Se enfrento al AEK de Atenas en un partido en el que los rojiblancos del Olympiakos partían como favoritos, de forma que se esperaba un encuentro fácil para el equipo dirigido por Valverde.
Sin embargo, nos encontramos un partido lleno de emoción que nos hizo disfrutar desde el principio hasta el final. El Olympiakos y el AEK Atenas empataron a 2 goles en el tiempo reglamentario. Dudu y Matt Derbyshire anotaron para los rojiblancos y el argentino Ismael Blanco hizo los tantos para el AEK. El delantero ex del Olimpo de Bahía Blanca fue uno de los protagonistas de una noche que tuvo mucho de albiceleste.
En la prórroga, Derbyshire repetía con el Olympiakos mientras que en el AEK otro argentino, Nacho Scocco; hacía dos goles para el equipo ateniense, al que convertía en virtual ganador de la Copa.
Cuando todo parecía conducir a una derrota del Olympiakos, surgió el tercer protagonista argentino de la noche, un viejo conocido de la afición española que en Grecia vuelve a ser el jugador que brilló en las filas del Zaragoza, Luciano Martín Galletti. En un cabezazo épico, el ex del Atlético de Madrid convertía para el Olympiakos y provocaba el delirio en los aficionados del Olympiakos. Después del tiempo reglamentario y la prórroga, ambos equipos seguían igualados en el marcador.
Con el impresionante empate a 4, el partido tuvo que decidirse en la tanda de penaltis. Los lanzamientos desde los 11 metros se hicieron interminables y se vivió un final de infarto en el que el eterno Nikopolidis se erigió en el héroe del Olympiakos. El portero de 38 años paró el penalti lanzado por Agustin Pelletieri, convirtió el siguiente para su equipo y dio la victoria y por tanto el doblete al equipo de Ernesto Valverde en la noche más loca del fútbol griego.
Una vez conseguido este éxito, podemos hacer balance de la temporada del técnico español en el Olympiakos. Sin duda ha conseguido un doblete muy importante como preparador del equipo griego, pero siempre se le criticará el no haber estado a la altura de las exigencias del club en Europa, donde cayó en la fase previa contra el modesto Anorthosis y no consiguió la clasificación del equipo rojiblanco para la fase de grupos de la Liga de Campeones.
Sin embargo, nos encontramos un partido lleno de emoción que nos hizo disfrutar desde el principio hasta el final. El Olympiakos y el AEK Atenas empataron a 2 goles en el tiempo reglamentario. Dudu y Matt Derbyshire anotaron para los rojiblancos y el argentino Ismael Blanco hizo los tantos para el AEK. El delantero ex del Olimpo de Bahía Blanca fue uno de los protagonistas de una noche que tuvo mucho de albiceleste.
En la prórroga, Derbyshire repetía con el Olympiakos mientras que en el AEK otro argentino, Nacho Scocco; hacía dos goles para el equipo ateniense, al que convertía en virtual ganador de la Copa.
Cuando todo parecía conducir a una derrota del Olympiakos, surgió el tercer protagonista argentino de la noche, un viejo conocido de la afición española que en Grecia vuelve a ser el jugador que brilló en las filas del Zaragoza, Luciano Martín Galletti. En un cabezazo épico, el ex del Atlético de Madrid convertía para el Olympiakos y provocaba el delirio en los aficionados del Olympiakos. Después del tiempo reglamentario y la prórroga, ambos equipos seguían igualados en el marcador.
Con el impresionante empate a 4, el partido tuvo que decidirse en la tanda de penaltis. Los lanzamientos desde los 11 metros se hicieron interminables y se vivió un final de infarto en el que el eterno Nikopolidis se erigió en el héroe del Olympiakos. El portero de 38 años paró el penalti lanzado por Agustin Pelletieri, convirtió el siguiente para su equipo y dio la victoria y por tanto el doblete al equipo de Ernesto Valverde en la noche más loca del fútbol griego.
Una vez conseguido este éxito, podemos hacer balance de la temporada del técnico español en el Olympiakos. Sin duda ha conseguido un doblete muy importante como preparador del equipo griego, pero siempre se le criticará el no haber estado a la altura de las exigencias del club en Europa, donde cayó en la fase previa contra el modesto Anorthosis y no consiguió la clasificación del equipo rojiblanco para la fase de grupos de la Liga de Campeones.
belo texto, mario! saludos, pp
ResponderEliminarSí fue loca si, 4-4 y luego más de 15 penaltis...
ResponderEliminarPartidazo! la lastima fue que me lo perdí, pero bueno...
Un saludo!
Siempre me parecio un gran entrenador Ernesto, a nosotros nos llevó a la final de la Uefa y con el Olympiakos esta triunfando de lo lindo.
ResponderEliminarSaludos.
http://sentimientoperico.blogspot.com
Me alegro mucho por Valderde, la televisión debería destacar más los éxitos que están obteniendo entrenadores y jugadores españoles en el extranjero. No hace falta realizar fichajes millonarios teniendo la cantera que tenemos en España... Un saludo
ResponderEliminarfelicidades a Ernesto Valverde, siempre es un orgullo que un españl nos represente en el extranjero de la forma en la que lo hace el, liga y copa, sin duda es un muy buen entrenador, le saca mucho rendimiento a los equipos, al Athletic lo dejo 5º en Uefa, al Espanyol lo dejo 6º creo y llego a la final d Glasgow y siempre haciendo un futbol vistoso y a la vez muy táctico, me encantaria para el Sevilla la verdad, aunque de momento no se puede hablar hasta que no termine la liga
ResponderEliminarSu temporada es excelente. Liga y copa que compensan sobreadamente el fracaso europeo. A mi me da que en unos meses lo tenemos por casa otra vez. A ver si alguien apuesta por él de verdad y pone un buen equipo a su disposición.
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