miércoles, 13 de mayo de 2009

Un póker que hace historia en Caracas

El Caracas se coló con todo merecimiento ayer en la historia de la Copa Libertadores. Después de haber perdido 2-1 en la ida de su eliminatoria de octavos de final con el Deportivo Cuenca, parecía que todo estaba perdido para los venezolanos.

Sin embargo, el equipo caraqueño se vistió de gala y dio el máximo en cada minuto de un partido que pasará a la historia del fútbol venezolano y de Sudamérica.

Un equipo concentrado en el encuentro, que disputó como si de una final se tratase, consiguió no sólo empatar la eliminatoria ni remontarla, sino también sentenciarla y barrer del campo al Deportivo Cuenca, que nada pudo hacer ante el vendaval caraqueño.

El Caracas nunca se relajó en el partido y buscó la portería contraria una y otra vez. Incluso después de adelantarse en el electrónico con un tanto de penalti ejecutado por Darío Figueroa, no especuló con el resultado, en el que tuvo gran incidencia Emilio Rentaría. El delantero dio el pase del segundo gol al mexicano Rodrigo Prieto y anotó el tercero con un disparo desde fuera del área en el minuto 55 del encuentro, en el que todo estaba ya resuelto.

Para que la fiesta fuera completa, José Manuel Rey gritó el cuarto gol del equipo colorado después de materializar un tiro libre que besó la parte más alta de la malla de la portería del Deportivo Cuenca y que provocó el delirio de los hinchas y desató la locura en las gradas del estadio Olímpico de la UCV. La afición del Caracas celebró por todo lo alto el póker de goles conseguido por su equipo, así como la histórica clasificación de su club para cuartos de final de la Copa Libertadores por primera vez en su historia.

-El Caracas se enfrentará en cuartos de final al ganador de la eliminatoria entre Gremio (Brasil) y Deportivo San Martín (Perú).

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