martes, 7 de abril de 2009

Bufandas olvidadas

Mes de abril. Normalmente en el mundo del fútbol vivimos en esta época esa situación en la que los aficionados tiemblan y quiebran sus gargantas embargados por las emociones más fuertes y sus peores temores. Es ahora cuando sus equipos están en la recta final de los campeonatos, jugandose la conquista del título, la clasificación para competiciones europeas o el descenso a otra categoría. Es el momento de las aficiones, que intentan llevar en volandas a su equipo donde quiera que éste necesite ir. Ya lo hacían antes, pero ahora es cuando menos importa si la voz se apaga con tal de conseguir el objetivo.

Sin embargo, desgraciadamente esto no es suficiente, porque como se suele decir el fútbol es de los jugadores, que son los que juegan y los éxitos y fracasos de los clubes dependen sobre todo de lo que ellos hagan en el campo. Si nos pusiéramos a reflexionar sobre el papel de aficionados y los futbolistas, veríamos que a veces los aficionados se encuentran solos.

No hay respuesta del equipo a las gargantas enfervorecidas de los hinchas. Durante algunas temporadas hemos visto como presidentes ponían en evidencia a sus propios clubes, y este año incluso hemos presenciado algún que otro fraude hacia entidades y aficionados. Eso sin contar con los presidentes que tienen como hobby sacar la lengua de paseo, las aficiones merecen algo mejor que tener un dirigente bocazas.

En el terreno de juego, desde la grada se pide voluntad a los jugadores. Una voluntad que a veces los futbolistas de nuestros clubes no demuestran. Fruto de ello, cada lunes, podemos escuchar frases como “no les dio la gana”.

Uno de los últimos insultos al hincha se produjo hace unas semanas con la famosa broma del jeque árabe en Sevilla. Durante una semana un personaje vendió la idea de que un jeque millonario compraría el Betis, ilusionando a la afición de la entidad que se entregaba emocionada y temerosa a la venida del emir. Finalmente, todo fue una broma de un desocupado que decidió divertirse jugando con los sentimientos de los aficionados.

Sin embargo, es justo acordarse también de una buena noticia relacionada con las aficiones. El presidente del Villarreal anunció que la próxima temporada los parados no pagarán abono. Esta medida es un ejemplo de ayuda y complicidad con los aficionados, que siempre están ahí.

Viendo este panorama, salvo alguna excepción; parece que todos tienen muy claro dónde está el dinero, pero han olvidado dónde están las bufandas.
Un saludo a todas las aficiones, no os rindáis nunca.

2 comentarios:

  1. Yo opino que debemos de ser lo aficionad@s los que animemos al equipo y no que el equipo nos anime.

    Saludos.

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  2. Buena entrada, si señor! No estaba al tanto de episodio ocurrido en Sevilla. Bien por el Villarreal, un club modelo a seguir.

    Saludos,

    Migue

    pd: pueden pasar a retirar un premio por mi blog

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