martes, 21 de abril de 2009

El otro día vi a Ronaldinho

Y me alegré de volver a verle. Ha cambiado un poco, aunque conserva cierta dosis de fantasía de la que regalaba en Barcelona. Fue en San Siro, durante el partido entre el Milan y el Torino. Inzaghi ya había anotado dos goles para la squadra rossonera y tenía ganas de marcar el tercero de su cuenta y hacer otro triplete en esta temporada.

De repente, cuando el balón circulaba por el centro del campo milanista, hubo un pase que atravesó la medular y llegó a las botas de un brasileño que llevaba el dorsal 80 en la camiseta. El jugador pisó la pelota, contempló el panorama que tenía enfrente y mirando al tendido dio un pase hacia el hueco para que el Pippo completara su deseo haciendo que el balón besara por tercera vez la malla de la portería del Torino.

Fue entonces cuando me di cuenta. Aquel dorsal,… aquel brasileño… era él. Fue un placer volver a ver a Ronaldinho, el de los pases largos mirando a la grada, el de la magia en las botas, el que hace fantasía convirtiendo en realidad un pase que nadie llegó a soñar porque no se lo esperaba. En definitiva, el jugador en el que el Milan había puesto su confianza este verano.

En esta temporada, el brasileño ha tenido más sombras que luces como jugador rossonero. Durante algunos meses se ha cuestionado su rendimiento en el equipo, e incluso el técnico milanista, Carlo Ancelotti, le ha dejado en el banquillo en más de una ocasión.

Sin embargo, hay que decir a favor de Dinho que todavía es capaz de regalarnos momentos de gran fútbol a los aficionados del balón y a sus compañeros de equipo, como el gol de cabeza en el derby contra el Inter, el zapatazo en Copa de la UEFA contra el Sporting de Braga, o el pase a Inzaghi en el 5-1 contra el Torino.

Espero ver más veces a este Ronaldinho que tanto me gusta, aunque su mejor nivel ya lo dejó en Barcelona. Ahora, aparece y desaparece como por arte de magia y nunca mejor dicho; porque cuando Dinho se muestra su juego está tocado por la varita mágica que convierte al fútbol en arte.

Por cierto, algo más tarde, seguí viendo a Ronaldo. Jumanji ha perdido velocidad, pero siempre conservará el instinto goleador. Volvió a marcar como visitante en el São Paulo-Corinthians y clasificó a su equipo para la final del campeonato Paulista contra el Santos, que en la otra semifinal había derrotado al Palmeiras.

7 comentarios:

  1. Ronaldinho es un exepcional jugador, pero en el Barca le han quemado su carrera, a como lo estan haciendo con Lionel Messi, el problema de este equipo del Barca es que si no esta su estrella, se apagan, y eso sucedía con Ronaldinho, tenía que estar en la cancha para que el Barca brillara y ganara, cuando no lo hizo, se les vino el mundo encima.

    Saludes:

    http://futbolnica.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  2. Ronaldinho no es ni la tercera parte de lo que era pero aún es capaz de hacer magia en un metro cuadrado.
    Atención a Douglas Costa, del Gremio, dicen que es el nuevo "Dinho", 17 años y suena para Madrid, Manchester, Juve,...
    Respecto a Ronaldo, está gordo, está lento, está medio cojo,...pero sigue siendo un killer, es autentico megacrack.
    Un saludo

    ResponderEliminar
  3. Mario, o Ronaldinho não é mais o jogador que brilhou no Grêmio e no Barcelona! Está devendo, e muito, como jogador, nos últimos tempos! Grande abraço, amigo!
    PP

    ResponderEliminar
  4. Tu artículo yo lo resumiría con la siguiente frase: el que tuvo retuvo.

    Te espero por mi blog, un saludoo

    ResponderEliminar
  5. Ronnie fue el más grande, lastima que hiciera más samba y menos trabajo.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  6. Hola!
    Aún conserva la técnica pero le falta voluntad y constancia. Una lástima. Aún es joven y podría haber dado mucho más de sí.
    saludos
    sílvia

    ResponderEliminar
  7. ronaldinho es un gran jugador y talvez
    uno de los mejores en la historia
    si le dieran mas constancia y apoyo moral
    el seguiria siendo ese jugador exelente que conocemos y no ese simple ronaldinho que carga la camisa y ya
    luis

    ResponderEliminar