El héroe del Olímpico volvió a ser decisivo

Ayer vivimos la esperada semifinal entre equipos ingleses de esta edición de la Champions. Tras los partidos ofrecidos por los conjuntos anglosajones en esta temporada, gran parte del público futbolístico esperaba un partido con muchos goles y emoción, y Manchester United y Arsenal no dieron el espectáculo que se esperaba.

Dieron otro totalmente distinto, fue un partido bonito en el que nos faltó un contendiente, el Arsenal, que no rindió a su mejor nivel y sobre todo en la primera mitad fue un muñeco en manos del United.

El equipo de Wenger, quizá preocupado por la reestructuración de la defensa, con el joven Gibbs haciendo lo que puede para rendir en las competiciones más exigentes.

El Manchester United entró en el campo con las ideas muy claras y en medio del delirio de Old Trafford ante la presencia de los suyos sobre el césped. Los diablos rojos salieron con un equipo bastante ofensivo, con Anderson y Tévez entre los titulares. El delantero argentino demostró otra vez que es altamente competitivo para llevar la camiseta de cualquier grande en la liga que sea.

Desde el inicio, el Arsenal se hizo cada vez más pequeño ante el vendaval propuesto por el United, que atacaba de la forma a la que nos tiene acostumbrados, como lo hizo contra el Inter, llegando por banda y atravesando la medular con velocidad una y otra vez.

Cristiano Ronaldo y Evra eran dos puñales que atravesaban una defensa del Arsenal que no estuvo bien. Como compensación, tuvo en Almunia a su mejor hombre. Paró todo lo parable, e hizo una maravillosa intervención en un remate de cabeza de Cristiano.
Pese a la gran actuación del guardameta español, un error de la defensa gunner dejó solo a O’Shea, que en el segundo palo hizo el único gol del encuentro.

El Manchester siguió dominando con menor fuerza, y el Arsenal intentó crecerse con las llegadas de Cesc, que se perdió con Nasri en el centro del campo. Por banda, Theo Walcott no estuvo fino, y arriba, Adebayor tuvo alguna ocasión que no consiguió materializar. Este Arsenal me recuerda a La Sexta. Tienen todo el fútbol pero no saben culminarlo con una buena retrasmisión. El Arsenal toca y toca sin una finalización clara, como La Sexta, tiene todo el fútbol y a la hora de materializarlo se pierde en multipantallas y falsos directos absurdos.

En la segunda parte, con el Arsenal intentando conseguir la igualada, Cristiano Ronaldo se sacó un chutazo desde fuera del área que se estrelló en el travesaño y acongojó a los gunners.

Con el dominio del Manchester y los intentos del Arsenal finalizó el partido. Almunia fue el mejor del Arsenal y el único que pudo sujetar al United. Ya tuvo protagonismo en la eliminatoria contra la Roma y ayer lo tuvo otra vez contra los diablos rojos. El héroe del Olímpico volvió a ser decisivo para los gunners.

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Acoso sin derribo

Mereció más el Barça que un triste empate a 0, pero lo cierto es que el equipo de Hiddink planteó el partido perfectamente para maniatar a los Messi, Eto'o y compañía. Se notaba que el holandés se había preparado a conciencia el partido, y mostró la que quizá sea la única forma de parar a los de Guardiola, aunque el resto de equipos no disponen del físico de los jugadores del Chelsea, por lo que tendrán difícil dejar su puerta a 0.

Por si fuera poco, en cinco minutos locos del inicio de la segunda parte, los jugadores del Barça empezaron a caer como moscas, llevándose la peor parte Márquez, que se perderá lo que queda de temporada. El 'manito', que estaba realizando un soberano temporadón, dejará un hueco muy difícil de cubrir. Además, Puyol sumó una tarjeta amarilla que supone un partido de suspensión, por lo que el Barça llegará a Stamford Bridge con la defensa en cuadro. Ahora es cuando gente como Cáceres debe dar un paso adelante, y demostrar la razón de su fichaje.

El otro que formará en el centro de la defensa es Piqué, pero este no tiene ya nada que demostrar. Llegó para completar la retaguardia, más como ganga que por interés real, pero se ha destapado como un grandísimo central. Por alto luchó con Drogba como si tuviera toda la experiencia del mundo, y fue el mejor sacando el balón desde atrás. Es cierto que le falta una punta de velocidad, pero de momento la suple con maestría. El Barça con él tiene central para años.

El problema ayer estuvo en los de arriba, ni Eto'o, ni Messi, ni Henry fueron capaces de aparecer con constancia y peligro. El argentino estuvo maniatado por un marcaje individual con ayudas constantes (pocas veces tenía menos de tres rivales cerca), Eto'o estuvo bien sujeto por los centrales, aunque tuvo la suya, que por desgracia falló, y Henry estuvo totalmente desaparecido, más después de recibir un golpe en un choque con Alex que le dejó semi inconsciente.

Los jugadores en ningún momento del partido se sintieron cómodos, y sólo Iniesta, que está en el mejor momento de su vida, pudo superar a su par con facilidad. En este sentido, el alemán Michael'nosoydeganartítulos' Ballack, viejo zorro, tuvo que recurrir a las faltas constantes, aunque se libró de la roja en una internada al final del partido que paró con un manotazo.

Así, el campo pareció en todo momento inclinado hacia el lado del Chelsea, que tuvo su oportunidad mediado el primer tiempo, cuando tras un fallo de Márquez provocó que Drogba encarara a Valdés, que salvó en dos ocasiones con una agilidad felina, demostrándole al rival que tenía enfrente, el sobrevalorado Cech, que hoy por hoy está por encima de él.

Por el camino, hubo tiempo para que el Camp Nou homenajera a Belletti, del que se tiene el mejor de los recuerdos por su gol en la final de la Champions de París ante el Arsenal hace tres ediciones. En los últimos cinco minutos, y de la mano de los recién salidos Bojan y Hleb, el Barça tuvo dos claras ocasiones, pero que no fue capaz de materializar.

Poco más se vio en el partido, por lo que la vuelta queda totalmente abierta, pero con ventaja para el Chelsea, que para eso juega en casa. Eso sí, si el Barça logra un gol, la cosa podría ponerse de cara para los azulgranas, pero no puede permitirse fallos en defensa, como pasó el año pasado contra el Manchester United.

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Clásico de Europa

En la edición 2004-2005 de la Champions League, el Fútbol Club Barcelona y el Chelsea fomentaron una nueva rivalidad, que se vio beneficiada por la reedición de los enfrentamientos en las siguientes dos temporadas. En total fueron seis encuentros cargados de emoción, de gran juego, de goles... y que en algunos quedaron grabados a fuego en las cabezas de los aficionados. Fue en esos enfrentamientos en los que algunos jugadores se hicieron un NOMBRE en Europa: Ronaldinho, Terry, Lampard, Deco, Drogba... hasta el mismísimo Maxi López tuvo su momento de gloria.

Todo comenzó aquel 22 de febrero del año 2005. El joven Barça de Rijkaard se enfrentaba al equipo más famoso de Europa, que se había dejado ver con los millones de Abramovich, puestos a disposición del recién llegado Mourinho para hacer un equipo a medida. Y vaya que si lo hizo. Aquella temporada el Barça estaba marcado por las bajas. Las lesiones de larga duración de Edmilson, Gabri, Larsson y Motta habían obligado a los azulgrana a recurrir al mercado de invierno en busca de refuerzos, que fueron Albertini y Maxi López.
Puede parecer vano, pero fue este último el que marcó el choque. A pesar de la constelación de estrellas presentes en aquel partido (Ronaldinho, Deco, Eto'o, Puyol, Xavi, Lampard, Terry, Drogba, Ricardo Carvalho, Cech...), fue el rubio argentino el que acaparó los flashes. El partido se puso complicado para el Barça con un gol en propia meta de Belletti, y cuando la cosa estaba muy cuesta arriba, entró en el campo Maxi López, en su puesta de largo con el equipo. Nadie daba un duro por él, pero en un balón suelto en el área braceó con Terry y marcó un gol digno de los mejores delanteros del mundo (nada más lejos de la realidad, como se descubrió después). El estadio estallaba y 'el alemán' bailaba su típica celebración.

Minutos después, un intento de tiro del mismo protagonista caía en los pies de Eto'o que fusilaba a Cech y ponía en ventaja al Barça para la vuelta. Dos semanas después, y tras el 2-1, los aficionados se sentaban ante sus televisores con la esperanza de ver un gran espectáculo, y seguro que no salieron defraudados. El 8 de marzo del 2005, un Barça que seguía acumulando bajas y victorias en la competición doméstica, salía a Stamford Bridge comandado por Gerard López en el centro del campo, una de las peores decisiones de Rijkaard en todo su paso por el Barcelona.

En media hora, y en una de los mayores demostraciones de toda la historia de cómo se debe jugar al contraataque, el Chelsea se ponía 3 a 0, ante un Barça perdido, irreconocible, y que parecía que aún podía encajar más. Pero entonces, en aquel momento, apareció el que era el mejor jugador del mundo con diferencia. Ronaldo de Assis, Ronaldinho, en una exhibición individual, marcaba dos goles, uno de ellos tremendo, que en ese momento daban el pase al Barcelona. Y todavía no se había llegado al descanso.

La segunda parte fue un duelo de ocasiones, de oportunidades, de lucha hasta la extenuación... una oda al mejor fútbol. Pero fue en el minuto 75, a la salida de un córner, y con toda la picaresca del mundo (y con una falta de Carvalho a Valdés que Pierluigi Colina no quiso pitar), como Terry decantaba el encuentro con un golazo de cabeza. El primer envite entre las dos potencias terminaba con el pase del Chelsea a semifinales (eliminado injustamente por el Liverpool), y un 4-2 para el recuerdo. .

No tendrían que esperar mucho los culés para cobrar su venganza. Exactamente, un año. En esa ocasión se trataba de los octavos de final, que deparaban un partido que perfectamente podría ser el último del torneo, pero los hados quisieron que lo disfrutáramos antes. En esta ocasión el primer partido era en Stamford Bridge, y el Barça llegaba con ganas de demostrar que en ese momento era el mejor equipo del mundo (que lo era). Y el primero que quiso demostrar su calidad fue un jovencito que se llamaba Leo Messi, que llevaba el 30 en la camiseta, que por entonces sólo apuntaba maneras, pero que puso Londres a sus pies. Amargó la noche de Del Horno (quizá aquel día acabó su carrera), y avisó de que el futuro quizá fuese suyo (pues sí).

Sin embargo, y a pesar del acoso y derribo llevado a cabo, era el Chelsea el que se adelantaba con un gol en propia meta de Motta, en una inocente falta (aunque contra aquel equipo nada era inocente). Pero el mejor fútbol no se podía quedar sin premio. Terry en propia meta y Eto'o a centro de Márquez daban la vuelta al marcador y permitían una vuelta en el Camp Nou y con ventaja. Sin embargo, aquel partido fue recordado por la actuación de Mourinho. El pícaro portugués intentó llevar el partido a su terreno, acusando al Barça de hacer teatro.

La vuelta no fue mejor para los londinenses, que, sin embargo, gozaron de numerosas oportunidades para dar la vuelta al marcador, sobre todo a balón parado, su gran especialidad. Aquel quizá no fuera el mejor partido de la historia, ni el más emocionante, pero apareció Ronaldinho para recordar que era el mejor del mundo, que podía con todos, para con otro golazo sentenciar la eliminatoria. En las postrimerías del partido Lampard ponía el empate al marcar un dudoso penalti, pero el Barcelona ya tenía la clasificación. Por cierto, en aquel partido un barbudo Oleguer amargaba la noche de Robben, maniatándolo, sujetándolo y evitando que pudiera crear peligro, en el que quizá sea el mejor partido jugado nunca por el amigo Presas.

La siguiente temporada ambos equipos volvieron a enfrentarse, pero ya no era lo mismo. Además de ser en la fase de grupos, el Barça ya había iniciado su caída, de la que sólo se recuperó con la llegada de Guardiola. Aquellos duelos estuvieron marcados en todo momento por la superioridad del Chelsea, que seguía gastando miles de millones cada año, a pesar de no obtener resultados en la máxima competición.

BONUS TRACK

Años antes, en la temporada 99-2000, el Chelsea y el Barça se enfrentaron en una eliminatoria que servía como entrante al que es el gran duelo de la Champions en el actual siglo. Aquellos equipos no tienen nada que ver con los actuales, y sólo Pep Guardiola repite, aunque ahora como entrenador. En la ida, disputada en Londres, los blues se llevaron el partido con suficiencia. Al descanso ya ganaban 3 a 0, y el Barça estaba desaparecido. Los Zola, Flo o Deschamps parecían imparables. Pero en la segunda parte parece que la charla de Van Gaal surtió efecto, y liderados por Luis Filipe Madeira Caeiro, conocido como Figo, marcaba un gol que dejaba la eliminatoria abierta.

En la vuelta, con el Camp Nou a rebosar, con un mural enorme y casi perfecto en el que se podía leer un '2-0', miles de personas eran testigo de una de las noches mágicas del estadio azulgrana. A pesar de que se decía que el Chelsea era mejor de visitante que de local, el poderío del Barça se dejó ver en todo momento. En una primera parte antológica, los azulgrana se ponían 2 a 0, por lo que el pase era suyo. Sin embargo, un error de Hesp permitía al noruego Flo poner el 2 a 1 que se lo quitaba. Pero aquel Barça era mucho Barça. Liderados de nuevo por Figo, perfectamente acompañado por los Rivaldo, Kluivert y compañía, lo dieron todo para llevarse el encuentro.

A seis minutos para el final, Daniel García Lara ponía el 3 a 1 que daba paso a la prórroga, y Rivaldo fallaba un penalti que hubiera dado el pase automático a los azulgrana. Pero el extra time no tuvo color. El portugués, también conocido como Judas en algunos lugares, provocó un penalti que Rivaldo si marcó, expulsó a Babayaro, y se ganó el premio de ser el mejor futbolista del mundo. Al final, Kluivert se unió al festival y puso el 5-1 definitivo.

En unas horas ambos equipos vuelven a enfrentarse, y a poco que se porten, los aficionados podremos disfrutar de un gran espectáculo. En esta ocasión tampoco faltan estrellas, los entrenadores siguen siendo algunos de los mejores del mundo, y en esta ocasión el ganador ya estará en la final. El duelo está servido. Que gane el mejor.

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El 11 de la jornada: Liga BBVA

Por fin, siete jornadas después, el Madrid le volvió a recortar puntos al Barça, para poner emoción antes de la llegada del gran clásico mundial. Además, los blancos vencieron pese a la adversidad en forma de bajas y con un gran juego (para lo que se espera de ellos). En ese partido el Sevilla siguió complicándose la clasificación para la Champions, que ya no tiene tan clara. Por abajo las cosas se complican, y mientras el Numancia tiene todas las papeletas para descender, el Espanyol por fin ha salido de ahí abajo, en detrimento del Sporting, que como no reaccione vuelve a la División de Plata. En este sentido, el Getafe, que empezaba a oler el riesgo, ha largado a Víctor Muñoz para poner en su lugar a Míchel.

Así, los jugadores elegidos para integrar el 11 de la jornada por los méritos realizados son: Asenjo; Fuentes, Maduro, Marcos; Simao, Pablo Hernández, Guti, Marcelo, Jurado; Llorente, Raúl.

Portero:
- Asenjo. Partido muy serio del portero vallisoletano, que mantuvo su puerta a cero con grandes paradas, demostrando que el futuro de la roja con él está asegurado.

Defensa:
- Fuentes. Gran partido de la defensa del Villarreal, que Fuentes además adornó con un gol vital para la lucha por los puestos de Champions League.

- Maduro. Criticado desde su llegada a Valencia, fue un auténtico muro contra el Barça, a pesar de jugar en una posición que no es la suya. Completó su partido con el gol que suponía el empate a la salida de un córner.

- Marcos. El veterano defensa del Valladolid hizo un gran partido, ayudando a que su equipo no encajara goles y creando peligro con sus internadas.

Mediocampo:
- Guti. Hacia tiempo que Guti no hacía un partido de tanta calidad. Dominó el encuentro, le puso ritmo y surtió de balones a los atacantes. Cuando Juande lo quitó los blancos sufrieron.

- Jurado. ¡Qué temporada de Jurado! Con la falta que le hace al Atlético un jugador de sus características, es increíble que lo tengan gratis dando exhibiciones con el Mallorca. Una más el domingo, que además culminó con el gol que abría el partido.

- Marcelo. Pitado hace unos meses por el Bernabéu, ahora mismo es el jugador más en forma del equipo. La banda izquierda es suya, ya sea de lateral o como interior, de lo que jugó contra el Sevilla.

- Pablo Hernández. El mejor del partido entre el Valencia y el líder. Hacía meses que un jugador no creaba tantos problemas a la defensa del Barça, y el veloz y hábil Pablo lo logró.

- Simao. Poco a poco vuelve a su mejor nivel. Contra el Sporting marcó un gran gol (con ayuda del portero gijonés) y creó mucho peligro.

Delantera:
- Raúl. El mejor partido de Raúl en meses (o años). Tres goles como tres soles que le dan vida a la Liga, una semana antes del superclásico.

- F. Llorente. No hizo falta más para superar al Racing. Marcó un gol, provocó un penalti, e hizo lo que quiso con la defensa santanderina, como si fueran niños.

Banquillo:
Esteban; Capdevilla, Granero, Guardado, Luque, Negredo.

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Monumento a Raúl

Un tal Raúl ha protagonizado hoy una nueva remontada del Real Madrid en Liga, ha logrado un 'hat-trick' demostrando que a pesar de lo que opinan muchos, sigue siendo un jugador excepcional, un luchador nato y un goleador sin igual. Sigue rompiendo récords, como demuestran sus números, y los 24 goles que ha conseguido esta temporada no pueden ser casualidad, ni tampoco fruto de un jugador acabado.

El Sevilla salió muy motivado frente a los blancos para no encajar su cuarta derrota seguida, pero finalmente no la pudo evitar, y ahora se ha situado el Valencia a sólo un punto de la tercera posición (que da acceso directo a la Liga de Campeones). El Madrid se pone a cuatro puntos del Barcelona y la Liga adquiere más emoción que nunca, y la próxima parada se encuentra en el Bernabéu, es el gran Clásico de nuestro fútbol. ¿Quién cogerá el tren que lleva directamente al título?

La caída del Sevilla está siendo espectacular, cuatro derrotas consecutivas frente a Getafe, Valencia, Barcelona y Real Madrid, han hecho que la ventaja haya pasado de 11 puntos a uno, y a sólo un punto más se encuentra el Villarreal, que tras los malos resultados de las últimas jornadas ve un resquicio para meterse directamente en Champions. La lucha por la tercera plaza está que arde, veremos a ver quién se quema en el próximo partido (Villarreal-Sevilla). Más emoción imposible.

3. Sevilla – 57 puntos
4. Valencia – 56 puntos
5. Villarreal – 55 puntos

En lo que se refiere al partido, éste tuvo dos partes, una antes y otra después del gol, los primeros 20 minutos fueron del Sevilla y se disputaron en campo madridista. El Madrid sólo achicaba balones, mientras Kanouté y Renato hacían lo imposible por conseguir adelantar a su equipo. Muy activo estuvo también Romaric, pero el mejor de la primera parte fue Perotti por la banda izquierda, que además dio el centro para que Renato pusiera el primero en el marcador. Sólo hubo unos pocos minutos más de agobio por parte de los hispalenses, a partir de aquí los de Jiménez se vinieron abajo, se les acabó la gasolina por completo, y como frente al Getafe, en este caso Raúl hizo de Higuaín, el Madrid consiguió el tanto del empate en el minuto 45 a pase de Metzelder, que por unos segundos se convirtió en extremo para dar una asistencia en un momento clave, cuando más daño hace, cuando el rival se retira al vestuario pensando en ese gol, ése al que llaman psicológico.

Nada más comenzar la segunda parte se vio como el Sevilla no tenía fuerza para presionar al Madrid, lo cual hizo que los de Juande se vinieran arriba. Sólo alguna ocasión clara de Higuaín y un tiro lejano de Navas, que obligó a estirarse a Casillas, fueron lo más destacado hasta la llegada del jugador blanco por excelencia, el ‘7’ del Madrid, Raúl, que logró dos goles más, esos goles que tanto le caracterizan, por estar siempre ahí, siempre atento en el área esperando el fallo (en este caso de Palop), esperando un posible rechace que le dé la gloria al Madrid, que le dé tres puntos vitales para seguir luchando por el campeonato.

Era el minuto 70 y con 1-3 en el marcador el Sevilla estaba muerto, no daba señales de vida, Capel puso con su gol picante al encuentro, pero Marcelo logró el cuarto en una contra en el descuento. Total, que tres puntos para el Madrid y la Liga en un puño.

Lo dicho, lo próximo el Real Madrid-Barcelona y cuatro puntos de diferencia. Antes habrá que estar atentos al encuentro de los azulgranas frente al Chelsea, que también tiene pinta de ser un partido de órdago, veremos a ver cómo llegan los de Guardiola al Bernabéu.

Lo que está claro es que será un encuentro entre el espíritu, la garra y el corazón frente al toque y la fantasía, frente al fútbol en estado puro. Adivinan quién es quién.

Fotos de Marca.com

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El 11 de la jornada: Liga BBVA

Varias exhibiciones y el Madrid-Getafe marcaron la jornada. Entre las primeras, destaca la paliza del Barça al Sevilla con un juego encantador, y la del Racing al Atlético de Madrid, que no se entera de por dónde van los tiros. Por abajo, el Espanyol da un nuevo paso de gigante hacia la salvación con su expeditiva victoria ante el Sporting, que es el que se complica, mientras el Numancia huele cada vez más a Segunda, un tufo que empieza a acompañar al Recre también.

Esta jornada ha sido especialmente difícil elegir un 11, debido a algunas actuaciones especialmente destacadas. Así, los elegidos para integrar el 11 de la jornada de la Liga BBVA han sido: Valdés; Garay, Zé Castro, Colotto; Apoño, Iniesta, Munitis, Camuñas; Villa, Henry, Higuaín.

Portero:
- Valdés. Quizá no haya sido el más espectacular o el más acertado, pero siete partidos sin encajar un gol, ser el Zamora destacado, y estar a poco más de un partido de igualar el récord de imbatibilidad del Barça merecen un reconocimiento.

Defensa:
- Garay. El central del Racing hizo un partido acorde al precio que pagaron por él. Creó mucho peligro en ataque con su poderoso juego aéreo y en defensa no pasó apuros.

- Zé Castro. Parece que el Depor ha encontrado una defensa de garantías. Si la semana pasada maniató a Llorente, esta semana le ha tocado a Negredo. Marcaje perfecto del portugués.

- Colotto. El compañero ideal para Zé Castro. Entre ambos amargan a cualquier delantero, por muy bueno que sea o muy en racha que esté.

Mediocampo:
- Iniesta. Es increíble lo de este jugador. Probablemente estemos hablando de uno de los cinco mejores jugadores del mundo en este momento, y lo demuestra en cada partido. El Sevilla fue el encargado de sufrirlo esta semana, y acabó marcando un gol y dando tres asistencias.

- Apoño. Otro que está a un nivel terrible. Él solo sustenta a todo el Málaga, y cada vez muestra más confianza en ataque. Contra el Osasuna provocó un penalti que él mismo marcó.

- Munitis. Se la lió al Atlético de mala manera. Los colchoneros no se enteraban de donde estaba el cántabro en ningún momento. Metió un gol, regalo unos cuantos, y fue un peligro constante.

- Camuñas. El año que viene se marchará a un equipo de la parte de arriba de la tabla. Su temporada es espectacular, y a sus goles hay que sumar el trabajo inagotable que hace. Contra el Villareal peleó como el que más, adelantó a su equipo, pero se encuentra muy solo.

Delantera:
- Villa. El Guaje está intratable en este tramo de la temporada. Con sus goles se ha metido de lleno en la lucha por el Pichichi, que se puede llevar si sigue a este ritmo. Contra el Betis otros dos goles, y una exhibición de lo que debe ser la labor de un delantero.

- Higuaín. ¡Qué casta tiene Gonzalo! Cuando parecía que estaba todo perdido, soltó un zurriagazo a la escuadra que daba la victoria al Madrid. Además, había abierto el marcador, y provocado un penalti que no fue pitado.

- Henry. Uno de los mejores partidos de Henry como barcelonista. Desde la izquierda le hizo un hijo a Mosquera (no es difícil), creó peligro, desbordó, tiró, asistió, se asoció, y acabó marcando el cuarto de la noche.

Banquillo.
Casillas; Pareja, Nené, Silva, Zigic, Keita.

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Onanismo

Se acaban los adjetivos para el mejor equipo de fútbol que se puede ver en el mundo hoy por hoy. Y no es que lo digan los aficionados del equipo (que quizá sean los que más dudas tienen, por su pesimismo histórico), sino que es algo reconocido entre los técnicos (Jiménez se une al clamor), entre los aficionados rivales, y entre los espectadores de todo el mundo. El partido se acabó en el minuto dos, cuando Iniesta (quizá el mejor jugador del mundo en relación calidad/kilos) se puso el disfraz de Zidane, avisando de que iba a impartir una de las mayores clases de fútbol de esta temporada.

Sin Puyol ni Messi, se pensaba que el Sevilla podía llevarse algo de un estadio que mascaba el miedo a la remontada tras el partido del Madrid el día anterior. Pero los cagómetros que anuncian en la prensa ya no son de tanta calidad como antes, y se rompen muy pronto. Y con un Henry más trabajador que nunca (innumerables robos de balón en zonas de peligro), con un Keita que parecía otro de los pequeños, con un Xavi que da 76 pases bien de 82 intentos, con un Alves que domina su banda, con unos centrales que son los primeros en jugar al fútbol...

Y a esto hay que sumar que el criticado Valdés (que no es tan bueno como Reina o Cech, que nunca fallan, como demuestran en todos los partidos) lleva 7 partidos sin encajar un gol, y está a menos de dos partidos de superar el récord de minutos sin recibir goles de Reina padre. Y es que es muy difícil meterle un gol a un equipo que no pierde la pelota, y que cuando lo hace la recupera en menos de 5 segundos, que te impide cruzar de medio campo, y que te obliga a pasarte 90 minutos corriendo. Lo explicaba Casquero tras el partido contra el Madrid: puede parecer que sales con más ganas contra los blancos, pero es que el ritmo del Barça es imposible de seguir, y parece que estás desganado, pero corres más que en cualquier otro partido del año.

Eso es en defensa, pero con lo que de verdad se disfruta es con el ataque, con la poesía, con el amor que destila este equipazo ideado por el genio del fútbol nacio en Samptedor. Alves, Piqué, Márquez, Touré, Xavi, Keita, Iniesta, Eto'o y Henry tienen la capacidad para pasar el balón con calidad, desbordar con solvencia y controlar con elegancia. Y lo hacen constantemente, desde que el partido empieza hasta que acaba.

Además, en esta ocasión, el público acompañó al equipo, a pesar de las horas intempestivas. Pero es que hay que aprovechar el momento. Este equipo no va a ser eterno (Guardiola además parece que no tiene como objetivo ser entrenador muchos años), y cada segundo que no disfrutemos, será un minuto que no podremos recuperar.

Por cierto, el resultado, aunque en estos casos es lo de menos, fue un 4-0. Iniesta, Eto'o, Xavi y Henry subieron los goles, cada cual de manera más espectacular. De esta forma, el Barça llega a los 92, y debe meter 15 para superar al Madrid de Toshack y los 107 goles. Eso son menos de 3 por partido, y por lo tanto, es posible.

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Higuaín y Casquero dan vida al Madrid

Otra noche épica en el Bernabéu permite al Real Madrid seguir vivo en la Liga. Hay que verlo para creerlo, lo que ha ocurrido esta noche ha recordado, sin duda, al espíritu de Capello de hace dos años cuando se lograron remontadas imposibles que al final fueron la clave para conseguir el campeonato. Esta vez todo ocurrió muy rápido, bastaron diez minutos para convertir un mal partido en un partido para el recuerdo.

Corría el minuto 84 y el Getafe montó un contraataque que culminó Albín con un golazo que dejaba al Madrid al borde del precipicio. Algunos aficionados comenzaron a abandonar el estadio, cabizbajos, pensando en la que temporada se había acabado, no había nada que hacer, nadie pensaba en dar la vuelta al partido, no había la valentía y el coraje de otras ocasiones. El fútbol no pensó lo mismo y nos deparó una nueva sorpresa, una nueva película en la que todavía faltan por aparecer algunos protagonistas.

Parece mentira que el conjunto de Juande Ramos sólo se encuentre a tres puntos del Barcelona después de la primera parte que realizó frente a los de Víctor Muñoz. Primero se adelantó el Getafe, Soldado cabecea un balón puesto por Granero, y el Madrid como si nada, ni se inmutó. Sólo hubo un tiro a puerta de los blancos y fue para adentro, los defensas del Getafe pensaban el descanso y se olvidaron de parar a Higuaín, el gol en el minuto 46 dejó muy tocado a los azulones. En la segunda mitad el Madrid intentó controlar un poco el juego y elaborar alguna jugada, cosa fácilmente superable tras un primer tiempo lento y desganado.

Sin embargo, que el Madrid hubiera comenzado el partido por debajo en el marcador hizo que cambiara el guión al que nos tiene acostumbrados, las carencias salieron a relucir, se echó de menos a Lass, por enésima vez se lesionó Robben y una locura de Pepe puso el partido cuesta arriba. Por lo tanto, se dieron las circunstancias ideales para que el Madrid probara de nuevo sus límites, para que jugara con fuego sin llegar a quemarse, para que la locura y el delirio inundaran de nuevo el Santiago Bernabéu.

Por cierto, un comentario aparte merece la agresión de Pepe, no sólo hace un penalti descarado que borraba al Madrid de la lucha por el título, sino que después lanza dos patadas descomunales contra Casquero que estaba tendido en el suelo. Por muy caliente que estuviera el choque estas acciones están totalmente fuera de lugar. Además, antes de abandonar el campo tuvo tiempo para soltar un puñetazo en la cara de Albín. El portugués ha pedido perdón y dice que no es un jugador violento, pero será difícil que se libre de una buena sanción.

Estábamos en el gol de Albín, minuto 84. Dos minutos después, Guti lanza una falta que se cuela por toda la escuadra de la portería de Stojkovic, que no puede hacer nada por evitar el empate. Faltaban escasos minutos para el final y los madridistas soñaban de nuevo con una remontada histórica, pero un penalti cometido por Pepe y la posterior agresión, que le costó la expulsión, acabó con todas las opciones del Madrid. Los aficionados ni se imaginaban que este penalti iba a formar parte de la heroica que se estaba gestando.

La remontada hubiera quedado en nada sin la ayuda de Casquero, que inexplicablemente decide tirar el penalti a lo Panenka, y lo peor no fue eso, sino como lo tiró, un toque flojo con muy poca elevación que paró Casillas con una sola mano. Nadie se creía lo que estaba ocurriendo, aún faltaba el descuento y el Madrid tenía la posibilidad de ganar el partido con uno menos, más épica imposible. Ya se había olvidado el juego, el aburrimiento, la falta de ideas, solamente importaba que la oportunidad estaba ahí. Cuatro minutos de añadido para resucitar la Liga, cuatro minutos para seguir creyendo en derrotar al todopoderoso Barça, cuatro minutos para creer en los milagros.

Faltaba un minuto para el final del partido, Higuaín coge la pelota, se acerca al área y de un zurdazo imparable bate al serbio Stojkovic, otro golazo del 'Pipita' que da la victoria al Madrid, otro golazo que enloquece al Bernabéu, otro golazo que da vida a la Liga.

Fotos de Marca.com y As.com

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El otro día vi a Ronaldinho

Y me alegré de volver a verle. Ha cambiado un poco, aunque conserva cierta dosis de fantasía de la que regalaba en Barcelona. Fue en San Siro, durante el partido entre el Milan y el Torino. Inzaghi ya había anotado dos goles para la squadra rossonera y tenía ganas de marcar el tercero de su cuenta y hacer otro triplete en esta temporada.

De repente, cuando el balón circulaba por el centro del campo milanista, hubo un pase que atravesó la medular y llegó a las botas de un brasileño que llevaba el dorsal 80 en la camiseta. El jugador pisó la pelota, contempló el panorama que tenía enfrente y mirando al tendido dio un pase hacia el hueco para que el Pippo completara su deseo haciendo que el balón besara por tercera vez la malla de la portería del Torino.

Fue entonces cuando me di cuenta. Aquel dorsal,… aquel brasileño… era él. Fue un placer volver a ver a Ronaldinho, el de los pases largos mirando a la grada, el de la magia en las botas, el que hace fantasía convirtiendo en realidad un pase que nadie llegó a soñar porque no se lo esperaba. En definitiva, el jugador en el que el Milan había puesto su confianza este verano.

En esta temporada, el brasileño ha tenido más sombras que luces como jugador rossonero. Durante algunos meses se ha cuestionado su rendimiento en el equipo, e incluso el técnico milanista, Carlo Ancelotti, le ha dejado en el banquillo en más de una ocasión.

Sin embargo, hay que decir a favor de Dinho que todavía es capaz de regalarnos momentos de gran fútbol a los aficionados del balón y a sus compañeros de equipo, como el gol de cabeza en el derby contra el Inter, el zapatazo en Copa de la UEFA contra el Sporting de Braga, o el pase a Inzaghi en el 5-1 contra el Torino.

Espero ver más veces a este Ronaldinho que tanto me gusta, aunque su mejor nivel ya lo dejó en Barcelona. Ahora, aparece y desaparece como por arte de magia y nunca mejor dicho; porque cuando Dinho se muestra su juego está tocado por la varita mágica que convierte al fútbol en arte.

Por cierto, algo más tarde, seguí viendo a Ronaldo. Jumanji ha perdido velocidad, pero siempre conservará el instinto goleador. Volvió a marcar como visitante en el São Paulo-Corinthians y clasificó a su equipo para la final del campeonato Paulista contra el Santos, que en la otra semifinal había derrotado al Palmeiras.

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El AZ de Van Gaal gana la Liga holandesa

A falta de tres partidos para que finalice el campeonato, el AZ Alkmaar, dirigido por Louis Van Gaal, se ha proclamado campeón de la Liga holandesa, y consigue así el segundo título tras la Liga conquistada en 1981. Es la primera vez en el siglo XXI que Ajax o PSV no acaban ganando el título.

Ya decíamos aquí cuando hablamos de la eliminación del Ajax en la Copa de la UEFA que esta temporada el AZ se estaba mostrando intratable tanto fuera como dentro de casa, el ejemplo está en las 31 jornadas disputadas hasta el momento.

Siempre es interesante echar un vistazo atrás y analizar las jornadas que el AZ ha estado imbatido, no sufría una derrota desde la segunda jornada, y eso que el equipo de Van Gaal perdió los dos primeros partidos frente al NAC Breda (1-2) y Ado Den Haag (3-0).

Tras este mal inicio de campeonato el AZ se puso las pilas y no volvió a perder un partido, ganó todos excepto cuatro partidos que acabaron en tablas. Hasta que llegó una jornada en la que podía ser campeón de Liga, esa fue la pasada jornada, fue en ese momento cuando la racha se truncó y el Vitesse dio la sorpresa ganando al líder en su casa (1-2) y evitando que pudiera celebrar el título. El equipo de Van Gaal había perdido la primera oportunidad, además, su directo rival, el Twente, había perdido frente el Feyernoord y había puesto en bandeja el título al AZ.

Todo esto ocurrió el sábado, pero no fue hasta el domingo cuando el Ajax dio la alegría al AZ y perdió por goleada en Eindhoven frente al PSV (6-2). Este triunfo permitió al AZ ganar la Eredivisie, y también disputar por primera vez la Liga de Campeones. Será interesante ver al equipo holandés midiéndose a otros equipos europeos de gran nivel. Como dice nuestro compañero José Sellés en su blog, puede ser una Champions muy atractiva junto con otros nuevos nombres como Rubin Kazan o Wolfsburgo.

Seguro que muchos recuerdan la temporada 06-07 en la que el AZ dejó escapar el título en la última jornada a favor del PSV de Ronald Koeman. Hoy, casi dos años después de aquella jornada de infarto, en la que también participó el Ajax, el AZ ha conseguido el ansiado título gracias a la victoria del PSV.

1. AZ Alkmaar – 76 puntos
2. Twente – 65 puntos
3. Ajax – 64 puntos

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El 11 de la jornada: Liga BBVA

Ya queda una jornada menos, ya estamos una jornada más cerca del final. Barça y Madrid mantienen su juego (uno bueno y uno malo) y sus resultados (uno excelente y otro excelente pero insuficiente). El Sevilla pinchó ante un rival directo como el Valencia y se complica su tercera plaza antes de encarar el Tourmalet, mientras el Atlético resucita con un recital de goles. Por abajo el Espanyol sigue soñando, el Numancia ya casi ha dejado de hacerlo, y el Recre se complica, al igual que el Sporting, que perdió en el Benito Villamarín.

Así, en una nueva jornada de emoción, los jugadores destacados para formar el 11 de la jornada son: Stojkovic; Pepe, Marcelo, Piqué; Apoño, Emaná, Banega, Mata, Pablo Álvarez; Forlán y Negredo.

Portero:
- Stojkovic. La revelación de la semana. Tras su partidazo ante el Sevilla, demostró que no era flor de un día, y amargó la tarde al Barça, que sólo le pudo superar tras un gol de rebote, a pesar de sus numerosas ocasiones.

Defensa:
- Pepe. Quizá el mejor jugador del Real Madrid. Velocidad, colocación, bien al cruce... lo tiene todo para convertirse en el mejor central del mundo, y ante el Recre volvió a demostrarlo.

- Marcelo. Se ha repuesto a los silbidos del Bernabéu, y le ha robado el sitio a Heinze, ya que aporta mucho más que el argentino, sobre todo en ataque, como demostró con su gol.

- Piqué. Si la suerte le sonriese, estaría cerca de los 10 goles esta temporada. Colocación perfecta, desbarató numerosos ataques del Getafe, e incluso se atrevió a irse al ataque.

Mediocampo:
- Apoño. Otra de las revelaciones de la Liga. Con su presencia, el Málaga aspira a entrar en Europa. Ante el Mallorca volvió a demostrar como debe hacerlo un buen mediocentro.

- Emaná. Espectacular lo del camerunés. En una semana movida por las declaraciones de su agente, se reveló con dos goles (golazos), llevando en volandas a su equipo hacia la victoria. Huele a equipo grande.

- Banega. Necesitaba el Atlético un jugador como él para desatascar el partido, y fue entrar el argentino, y se sacó de la chistera un golazo para enmarcar, digno de Messi, y además dio el control necesario a su equipo.

- Mata. Poco a poco, el asturiano ha logrado 10 goles y otras tantas asistencias en lo que va de Liga. Contra un rival directo de la calidad del Sevilla, provocó tarjetas, penaltis, y tuvo el valor de tirar el decisivo, ante la ausencia de Villa.

- Pablo Álvarez. Tenía ganas de demostrarle a Caparrós que se equivocó con él y lo logró. Amargó a la defensa del Athletic con su desborde, y culminó un gran partido con un golazo en las postrimerías del partido.

Delantera:
- Forlán. El uruguayo está a un nivel sensacional y lo volvió a demostrar. Perdonó una, pero la segunda fue para adentro. Un peligro constante para los rivales.

- Negredo. El jugador de la semana, y uno de los de la temporada. 20 goles, y llevando al Almería hacia la salvación. La Roja le espera con las puertas abiertas, y si es para hacer partidos como el de ayer, bienvenido será.

Banquillo:
- Aranzubía; Zé Castro, Pablo Hernández, Messi, Arango, Toquero.

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El pastel final de la UEFA será ucraniano y alemán

Ayer se acabó el sueño de la cuisine française en la Copa de la UEFA. Los jugadores franceses, que hasta el momento habían cocinado en Europa grandes momentos para el fútbol galo esta temporada, se deshincharon ante equipos ucranianos como un bizcocho que baja al abrir la puerta del horno. Marselleses y parisinos se quedaron sin postre europeo en una noche nefasta y los ucranianos les birlaron una porción del pastel europeo final.

Sinceramente esperaba más de los equipos fraceses en Copa de la UEFA. El Olympique de Marsella cayó 2-1 ante el Shakhtar Donetsk y el PSG salió goleado 3-0 del Lobanovsky Dynamo Stadium con su portero Mickäel Landreau cantando por bulerías.

Resulta increíble este resultado sobre todo después de que ambos conjuntos galos derrotaran en octavos a dos cocos europeos esta temporada, el combativo Ajax y el enrachado Wolfsburgo.
Es una pena esta eliminación, pues el pase de los dos equipos hubiera garantizado el derby más caliente de Francia en semifinales. Sin embargo, felizmente podremos ver un choque ucraniano en competición europea.

Cabe preguntarse cuáles son las causas de la aparición de estos equipos en semifinales. Quizá los pretrodólares invertidos estén dando sus frutos al estilo Zenit o sólo estemos ante una UEFA descafeinada -espero que no- como aquella de 2005 con el derby rumano entre Steaua y Dinamo de Bucarest.

Por el otro lado del cuadro estarán el Hamburgo y el Werder Bremen. El primero de ellos se deshizo sin dificultad del Manchester City, uno de los grandes fiascos de la temporada. Después de que los árabes gastaran una millonada en el equipo, el mejor jugador del conjunto celeste ni es Robinho ni lo compró el grupo inversor Abu Dhabi United Group for Development and Investment; se llama Elano Blumer y ya lo trajo Tashkin Shinawatra en 2007.

El Werder Bremen por su parte, tuvo mucho más trabajo en su partido en el Stadio Friuli contra el Udinese. Los alemanes venían de ganar 3-1 en la ida, pero los italianos no se achicaron en casa, sino todo lo contrario. El conjunto de Udine puso buen juego y ocasiones ante un gran Werder Bremen; y acabamos viendo un festival de golazos que acabo 3-3 y dio el pase al Werder.

Especialmente destacada fue la actuación maravillosa de Diego a lo largo de la eliminatoria en el conjunto verde, con dos golazos para enmarcar que estuvieron a la altura de las fantasías balompédicas de cualquier aficionado al fútbol.

Así pues, la UEFA se presenta animada con dos combinados ucranianos frente a frente y dos equipos alemanes como rivales. El día 20 de mayo en Estambul sólo dos de los cuatro conjuntos podrán obtener el preciado trofeo. Lo único que sabemos de momento es que uno de los que disputen esa final será ucraniano y otro alemán. ¿Quién pasará?

SEMIFINALES: (ida 30-04/vuelta 07-05)

Dynamo de Kiev - Shakthar Donetsk

Werder Bremen - Hamburgo

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Inexplicablemente paralizados

La vuelta de la eliminatoria ante el Arsenal en el Emirates Stadium era toda una final para el Villarreal. Por segunda vez en su historia tenía la oportunidad de pasar a unas semifinales de la máxima competición europea. Curiosamente, otra vez era ante el Arsenal, aquel equipo contra el que cayó la vez anterior el día en el que Riquelme decidió volver a esconderse en una gran cita y falló un penalti decisivo.

Después del resultado 1-1 de la ida, el Arsenal era ligeramente favorito para pasar a las semifinales, pero los amantes del fútbol confiaban en que el submarino amarillo podía hacer la machada en terreno londinense.

Tanto es así que incluso se obvió el bajón liguero por el que está atravesando el conjunto castellonense, pensando que en la Champions se pondría el traje de las noches mágicas de Liga de Campeones. Se confiaba en otra noche como la del Apostolos Nikolaidis contra el sorprendente Panathinaikos de Ten Cate.

Con toda la confianza del mundo el equipo amarillo se plantó ayer en el césped del Emirates dispuesto a eliminar al equipo local. Sin embargo, poco duró la motivación del combinado villarrealense, ya que, inexplicablemente, los hombres de Pellegrini sólo pudieron defender a un entonado Arsenal.

Quizá fuera por acudir al estadio de los gunners como visitantes, pero el Villarreal mostraba sólo su solidez defensiva parando como podía una y otra vez los ataques del equipo local.

En un balón largo por la parte derecha del ataque del Arsenal, Cesc rozó un esférico que llego al joven Theo Walcott, que se plantó solo ante Diego López, y salvó su salida picando el balón al palo contrario con un toque brillante. El guardameta del submarino amarillo había parado todo lo que había podido, pero el Arsenal se adelantaba y ponía la eliminatoria claramente de cara para los londinenses.

A partir de entonces, más de lo mismo. El Villarreal intentó estirarse sin éxito. Mati Fernández consagró su mala temporada desperdiciando un tiro de falta desde la frontal del área y Rossi no tuvo acierto de cara a portería. Mientras, el Arsenal llegaba una y otra vez con su rapidez característica, con oficio de Song robando la pelota, Cesc repartiendo el juego, y Van Persie y Adebayor desnudando con soltura a la defensa amarilla.

Poco a poco, el Arsenal se comió al Villarreal, Adebayor hizo el segundo en una contra y Van Persie el tercero tras ejecutar un penalti más que discutible de Godín sobre Theo Walcott que provocó las protestas de Eguren, que fue expulsado por Wolfgang Stara.

Con el 3 a 0 y uno menos reinó la desidia. Viendo que todo estaba perdido, Pellegrini sacó al canterano Jordi para que disputara algunos minutos en Champions. Mientras unos buscaban la ficha del jugador para enterarse de quién era el chico, otros seguían buscando al Villarreal que conocemos. ¿Dónde se había metido? En el Emirates seguro que no estaba.

IDA: Villarreal 1-1 Arsenal
VUELTA: Arsenal 3-0 Villarreal
GLOBAL: Arsenal 4-1 Villarreal

SEMIFINALES: Manchester-Arsenal
IDA: 29/04
VUELTA: 05/05

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El mejor portugués fue visitante

Ayer se cerraba una eliminatoria en la que sólo pudimos empezar a creer después del partido de ida. A priori era favorito el Manchester, y el Oporto no tenía nada que hacer; pero de la mano de Hulk, ese jugador de ataque revelación en territorio luso esta temporada, el conjunto de los dragões cumplimentó un partidazo en el estadio de Old Trafford intimidando al vigente campeón de la Champions.

Fue en ese momento cuando algún sector del mundo futbolístico comenzó a creer el los portugueses, a pensar que podrían repetir (aunque con peor equipo) aquella eliminatoria contra los ingleses en la que Mourinho estaba en el banquillo del Oporto.

Durante una semana, parecía que los dragões azuis volarían hasta lo más alto en su estadio, pues con 0-0 o 1-1 estarían clasificados. Incluso, pudimos ver en los periódicos portugueses que ellos serían diabos azuis ante los diablos rojos del Manchester United.

Ayer, cuando el árbitro Máximo Busacca pitó el inicio del encuentro, la emoción del conjunto dirigido por Jesualdo Ferreira siguió intacta, pero su juego comenzó a disiparse. Hulk no escogía ninguna solución adecuada en ataque y se chocaba una y otra vez con el muro británico formado por Ferdinand y Vidic. Al “Cebolla” Rodríguez, otro de los hombres claves en la ida, tampoco se le vio entonado durante el encuentro. Qué decir de Lisandro, una vez y otra lo intentó, pero o no le llegaban balones o el no los remataba correctamente.

En medio de la empanada de los dragões, sólo un portugués decidió dar el do de pecho en el partido. Fue Cristiano Ronaldo, un jugador al que le van este tipo de duelos, que no tuvo su día en la ida pero que quiso ser decisivo en la vuelta. En el minuto 5 del choque, CR7 soltó un misil con gran potencia que no perdió colocación ni velocidad hasta que no tocó la malla de la portería del Oporto.

Hoy nadie se cansará de emitir ese gol en televisión, y cada vez que lo veamos nos parecerá que el portugués estaba más lejos de la portería del brasileño Helton.

Con la alegría del Manchester, llegó otra mala noticia para el Oporto. En el minuto 31 se lesionaba Lucho González, y el técnico Jesualdo Ferreira lo sustituía por Mariano González, uno de los goleadores de Old Trafford.

A partir de entonces, el nerviosismo portugués fue creciendo cada vez más. Sólo necesitaban un gol para pasar, pero no llegaba. Del banquillo salió Ernesto Farías, que tuvo el tanto en su cabeza durante la segunda parte, pero se adelantó en el remate y no consiguió perforar la portería de Van der Sar.

Mientras, el Manchester fue desenvolviéndose como pez en el agua en el partido. Atacaba y creaba peligro a su rival, al que al mismo tiempo defendía sin despeinarse aprovechando que el ataque del Oporto no estaba fino.

Al final, 0-1 y el Manchester a semifinales. Sólo un portugués se vistió de héroe en toda la noche. Fue Cristiano Ronaldo, un portugués que jugaba con los visitantes, que marcó uno de los mejores goles que hemos visto en esta Champions, y que encima consumó otra pequeña venganza como sportinguista contra el Oporto.

IDA: Manchester United 2-2 Oporto

VUELTA: Oporto 0-1 Manchester

GLOBAL: Manchester United 3-Oporto 2

SEMIFINALES: Manchester-Arsenal

IDA: 29/04
VUELTA: 05/05

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Trámite superado

A los aficionados les costaba concienciarse de que se trataba de un partido de Champions de verdad, y los jugadores de ambos equipos acabaron contagiándose de esa actitud. Desde el primer minuto, y tras el 4-0 de la ida, se esperaba un arreón del Bayern de salida, a pesar de las declaraciones victimistas del condenado Klinsmann. Pero no fue así, a pesar de las necesidades, los alemanes apenas llegaban, y cuando lo hacían era sin gran peligro.

El Barça, por su parte, se iba al ataque con paciencia pero sin convicción, y acababan estrellándose en Lucio y Demichelis, que en esta ocasión hicieron un señor partido. Así, iban alternándose semiocasiones, casi de broma, de uno y otro equipo, mientras a unos miles de kilómetros en la otra eliminatoria se vivían las grandes emociones propias de una noche de Champions League.

Todo pudo cambiar si Toni hubiera marcado la única ocasión clara que tuvo en la primera parte (que ni era clara ni era ocasión, pero el italiano convierte en peligroso cada balón que toca), pero se fue a medio metro del arco de Valdés (bastante seguro todo el partido, salvo en el gol). Con esta oportunidad, el Bayern se desvaneció, y sólo Ribery, que volvió loco a todo el Barça, intentaba levantar la eliminatoria.

Por parte del Barça, y a pesar de contar con muchos de los habituales (Iniesta, Eto’o y Messi arriba, Xavi y Touré acompañando a Keita en mediocampo, y Alves, Puyol, Piqué y Abidal cerrando), tampoco ponían mucho empeño. Messi se enfrentó a un gran Lahm, Eto’o trabajó más en defensa que en ataque (espectacular despliegue del camerunés), e Iniesta no tenía ganas de aparecer en la primera parte. Otro de los habituales, Alves, bastante tenía con bregar con Ribery (menos mal que contaba con la ayuda de Puyol, porque el francés estaba fino) y con su fuerte temperamento, pues salió muy caliente y se ganó una tarjeta en una entrada tonta.

Durante el primer periodo merece la pena destacar la labor de Touré y Piqué, que por su tamaño y juego aéreo les tocó bailar con la más fea, Toni, al que pararon perfectamente, con un gran trabajo táctico. Por el otro lado, hay que destacar a Van Bommel, aunque negativamente. Estuvo todo el partido repartiendo estopa sin ton ni son, se metió en todos los jaleos, y a punto estuvo de marcar desde medio campo al devolver el balón tras una lesión.

Tras el descanso, esta vez si, el Bayern salió a por todas, y Ribery se desmarcó mientras Piqué rompía el fuera de juego. Dentro del área el francés no se ponía nervioso, y dando muestras de su enorme talento, bailaba a Valdés (que podía haber hecho algo más por anticiparse a la jugada) y abría el marcador.

En ese momento, en el que una mala decisión podía meter el miedo a los catalanes, pero el equipo de Guardiola tiene oficio además de calidad, y mantuvo controlado el encuentro en todo momento. Aparecieron los jugones, empezaron a triangular, y el Bayern dejó de oler la pelota. En una jugada de estas, el balón llegó a Iniesta, que en la segunda parte amargó a Lell (que tampoco es que sea un prodigio), hizo una de las suyas, la puso en el corazón del área para Xavi, que tocaba de cara para que Keita metiera un zambombazo de los suyos, de esos que en el Barça aún no había marcado, para poner la tranquilidad en el marcador.

El Bayern se veía obligado a marcar seis goles, ahí es nada, y Pep se abrazaba con Txiki Beguiristain en su destierro graderil. De ahí hasta el final rondos azulgranas y alguna patadita a destiempo de los bávaros, con la cabeza más puesta en las duras semanas que les esperan por delante que en el Allianz Arena. Empate digno y todos para el avión, que había que descansar.

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Inolvidable partido entre Chelsea y Liverpool (4-4)

Es difícil explicar lo que ha pasado esta noche en Stamford Bridge, dos equipos ingleses han decidido convertir un partido de Champions en una lotería que a punto estuvo de dar un susto a los locales, que llegaban de Anfield con una cómoda ventaja (1-3). El Liverpool quería apelar al espíritu de 2005 en Estambul cuando remontaron tres goles al Milan y ha estado a punto de convertir al Chelsea en otra víctima, pero los blues se revolvieron para no acabar en la lona y terminaron por dejar K.O. a los reds.

Hoy hemos vivido un partido que será recordado por mucho tiempo, el conjunto de Benítez pretendía obrar el milagro y a punto estuvo de conseguirlo en dos ocasiones, primero con dos goles en la primera parte y luego otros dos en el segundo tiempo que le pusieron a sólo un gol de pasar a semifinales. El Chelsea no se puso demasiado nervioso y aguantó hasta la segunda mitad para dar la vuelta al partido y meter tres goles que dejaban sentenciada la eliminatoria, pero ya saben ustedes que hasta el pitido final nadie puede cantar victoria y por eso los aficionados de Liverpool rozaron de nuevo la gloria con los goles de Leiva (un disparo desde fuera del área que toca en Essien) y Kuyt (con un cabezazo a centro de Riera).

Primero pegó el Liverpool, un listo Fabio Aurelio engañó por completo a Cech en un saque de falta, en vez de centro al área hubo tiro a puerta y el portero del Chelsea no pudo hacer nada por evitar el primer gol. El segundo vino tras un penalti, de esos que hay miles, pero el agarrón fue claro en el área, y quién fue, pues el bigoleador de Anfield, Ivanovic, que permitió a Xabi Alonso convertir el segundo y dar emoción a una eliminatoria que nos tenía reservada una segunda mitad antológica.

El Chelsea dijo hasta aquí hemos llegado y se puso los guantes para lanzar tres derechazos que dejaron temblando al Liverpool. Primero un centro de Anelka, que roza con la punta Drogba para descolocar a Reina que se mete el balón en su propia portería, luego un potente disparo de Alex de falta directa que Reina tampoco para y finalmente un gol de Lampard que cerraba el partido.

Pero no hablemos de cerrar que todavía faltaba un cuarto de hora y el Liverpool no daba nada por perdido, pero otro gol de Lampard puso fin a la ilusión red y nos dejó a todos con un buen sabor de boca, porque el Liverpool hizo todo lo que pudo y el Chelsea le devolvió la moneda, lo cual hizo del partido una fiesta y de la fiesta un momento histórico para los aficionados al fútbol.

El Chelsea pasa a semifinales y se las verá con el Barcelona, pero recuerden que el Barcelona tuvo durante los 90 minutos del encuentro dos rivales en semifinales, el Chelsea y el Liverpool, porque los partidos siempre tienen un ganador, pero partidos como éste, espectáculos como el que hemos presenciado, se definen con un palabra: inolvidable. Uno pasa a semifinales, pero los dos han demostrado su pasión por el fútbol y eso, quieras que no, ya es una victoria.

Cuartos de final (vuelta)
CHELSEA 4-4 LIVERPOOL
0-1 Fabio Aurelio (19’)
0-2 Xabi Alonso (p.28’)
1-2 Drogba (50’)
2-2 Alex (57’)
3-2 Lampard (75’)
3-3 Lucas Leiva (81’)
3-4 Kuyt (83’)
4-4 Lampard (89’)

Global: CHELSEA 7-5 LIVERPOOL

Fotos de Marca.com

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Una trinidad casi infalible

Suele decirse que en fútbol no hay varitas mágicas ni fórmulas perfectas para conseguir el triunfo. Es cierto, efectivamente no las hay, pero sí que hay combinaciones que nos pueden ayudar.

Si metiésemos en una probeta conceptos como delantero, Trinidad Tobago y fútbol inglés, sólo podríamos obtener gol, mucho gol.

La combinación no suele fallar, y esta semana lo hemos vuelto a comprobar con los goles de Jason Scotland para el Swansea y Kenwyne Jones para el Sunderland. Gracias a esta mezcla, hemos podido descubrir algunos delanteros que nos han dado grandes momentos de fútbol, buenos remates y muchos goles.

Uno de los primeros nombres en venir a nuestra mente pensando en esta combinación, sobre todo a la de los nostálgicos, es la de Dwight Yorke, un jugador trinitense que hace años vistió la camiseta del Manchester United y hoy quema sus últimos días de fútbol en las filas del Sunderland.

Como delantero del Manchester fue fundamental en Champions, y las retinas de los aficionados al fútbol se emocionan cuando recuerdan la pareja que hizo durante esa época con Andy Cole, regalando grandes partidos como aquel Manchester 3-Barcelona 3 en Old Trafford.

Actualmente, un compatriota de Yorke comienza a dar pequeños pasos para llegar a lo que un día hizo el delantero “devil” en la Premier. Se trata de Kenwyne Jones, con quien curiosamente Yorke comparte vestuario en el Sunderland.

El bueno de Kenwyne esta todavía lejos de llegar a ese nivel, pero su potencia y velocidad empiezan a dar muestras de lo que este futbolista es capaz de hacer, aunque de momento sus cualidades ya le han valido ser protagonista de rumores de traspaso a algún grande de la Premier.

Algunos escalones por debajo de Jones está todavía Jason Scotland, el killer del Swansea de Roberto Martínez. Por el momento, el trinitense ha sido uno de los líderes del equipo entrenado por el técnico español y ya es ídolo de la afición del Swansea.
Pese a carecer de la altura de Yorke o Jones, Scotland tiene cierta técnica y una gran potencia que le hacen ser referencia en ataque. Además, si el Swansea consigue finalmente el ascenso quizá podamos ver a este delantero en acción en la Premier.

Como se puede ver, las características del delantero trinitense; potencia, velocidad y definición; se adaptan perfectamente al fútbol inglés, que no les pide demasiada técnica, el aspecto del juego que menos controlan. Por ello, se espera que la cantera trinitense siga nutriendo a la Premier durante los próximos años. Todos estos jugadores serán delanteros, originarios de Trinidad y Tobago, y jugarán en la Premier. Quizá habrá alguna excepción con un delantero de este tipo que salga rana y confirme la regla; la combinación siempre funcionará, y será una trinidad casi infalible.

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